
De hecho Cartas desde Iwo Jima y La conquista del honor, las dos de Clint Eastwood me motivaron a continuar esperando obras de este extraordinario cineasta.

Dos miradas de un mismo suceso partiendo desde el punto de vista de los protagonistas, esa facultad de observar la historia sin apasionamientos patrióticos, y solo preocuparse por rescatar al ser humano con sus conflictos y sentimientos más profundos no es muy común en un norteamericano, (y más raro aún si este es republicano), definitivamente la madurez de Eastwood alimenta el buen cine.

Dentro de lo poco de cine europeo que llegó a la cartelera, vimos Escondido, de Michael Haneke, una puesta en escena que trabaja el llamado “cine contemplativo”, tan manoseado (por pose muchas veces) por algunos cineastas independientes, pero que sin embargo logra crear la atmósfera adecuada para esta historia en donde hasta el espectador se siente observado

El Laberinto del Fauno de Guillermo del Toro, esta historia oscura me gustó por su narración que no solo se mantiene en falso paralelo sino que permite una lectura dual de la historia, es decir, creer en la falsa pista.

Pequeña Miss Sunshine, de Jonathan Dayton y Valerie Faris película que con especial humor pone en tela de juicio los “valores de la familia” en nuestra sociedad.

Inland Empire de David Lynch no la vimos en la cartelera pero gracias a la Ventana Indiscreta de la Universidad de Lima llegó a nuestros ojos. En esta cinta David Linch nos recuerda que sigue siendo el maestro del mundo onírico, llegando a mostrarnos nuevamente ese cine surrealista que acarició desde joven estudiante (véase sus cortos), transportándonos a su universo de intensas sensaciones.
Aprovechando que mencioné la sala alternativa de la Universidad de Lima, quiero saludar a los buenos ciclos de cine que con mucho esfuerzo y preocupación nos hacen llegar nuestros contados cine clubs y centros culturales como Cafae, el C.C. Británico, la Universidad Cayetano Heredia, el C. C. de España, entre otros. Que siga el esfuerzo por difundir el buen cine con la esperanza de llegar a un público cada vez mayor.
Hay algunas otras pelas que me perdí, pero también queda el DVD para ponerse al día, y como dijo Cantinflas ... que pasen “un feliz happy niu york”
los dejo con algo de Inland Empire