No hay nada
Los adobes no huelen a tu cuerpo tierra,
ni el balcón sonríe en tu rozarme alegre,
hoy mi sombra calla el sol
al cardar la puerta vieja y seca
como la espera,
puerta amurallada tal tu palabra
y lo insondable de tus pasos idos.
Foto: Cecilia Pelán
Poema publicado en "Claroscuro" (Círculo Abierto Editores, 2005) de venta en librerías Época, La casa verde, Virrey, Contracultura, Atlántida, entre otras.
3 comentarios:
Hola, Fabricio. Ha sido una gran sorpresa saber que has llegado a mi blog. ¿Cómo así? Me alegro que te guste. Como siempre no hago otra cosa que ver películas, pero ahora también escribo sobre ellas. Gracias por tus comentarios.. saludos
Me encanta la mezcla de los elementos arquitectónicos-urbanos con ese cuerpo ausente. Muy interesante.
La imagen le añade mucha fuerza a esos versos tan hermosos.
Saludos
me gusta la cadencia de este poema
saludos
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